La mañana de este jueves 30 de marzo, en la Catedral de Concepción, se celebró la Misa de Inicio del Año Escolar 2023, la cual fue organizada por la Vicaría Pastoral de Educación. En la Eucaristía presidida por Monseñor Fernando Chomali participaron alrededor de 25 delegaciones de colegios de Iglesia de la Arquidiócesis.
En su homilía, el Arzobispo de Concepción puso énfasis en tres puntos importantes:”Lo primero es que todos queremos ser felices, esa es la clave de la educación católica. (…) La pregunta es: ¿Cómo ser felices? y para eso tenemos que mirar a Jesucristo, solamente Él nos puede ayudar a ser felices, no hay otro camino”.
“En segundo lugar tenemos una tarea, y también una de las tareas fundamentales de la educación católica, es ayudarnos a descubrir nuestra tarea, nuestra vocación. (…) El colegio, la familia, la parroquia tienen que ayudarnos a encontrar esa vocación y es una vocación de servicio. (…) Cada vocación está orientada al servicio porque la felicidad más grande la encontramos cuando damos la vida por los demás”.
“Y en tercer lugar tenemos una vocación al amor, amar y ser amado y ojalá los colegios nos ayuden a amar y ser amados. Eso significa respeto, significa humildad, significa generar vínculos profundos de amistad, significa tomarnos en serio, significa valorar la dignidad del otro”, puntualizó.
Tras la Misa, la Delegada Episcopal de la Vicaría para la Educación, Adriana Fernández, señaló que “fue una instancia muy bonita de participación de todos los colegios, yo creo que esto nos anima a tener un inicio de año centrado en los demás y para los demás”.
Cabe destacar que, durante la celebración, se entregaron algunos signos que son parte del enfoque de trabajo que tiene la Vicaría Pastoral de Educación para este 2023, entre los que destaca un mapa que recorrerá las comunidades educativas de la Arquidiócesis, invitándolas a adherirse al Pacto Educativo Global, a través de acciones concretas.
“Este pacto es una invitación que hizo el Papa el año 2020 para poder trabajar al interior de las comunidades educativas con 4 compromisos, entre ellos está poner en el centro a la persona, abrirnos a la acogida de todos, compartir y vincularnos mejor con la familia y escuchar a los jóvenes, niñas y niños”, explicó la Delegada Episcopal.
Alumnos, rectores, docentes y autoridades participaron con mucho regocijo y entusiasmo de la Eucaristía. Andrés Mella, trabajador social del Instituto de Humanidades de Coronel, expresó que “las palabras de Monseñor fueron bien hermosas. La verdad es que cada vez tenemos un Chile más diverso y tenemos que buscar las cosas que nos unen para poder avanzar como sociedad (…) entonces hacer un llamado a los jóvenes para seguir el ejemplo de Jesús y ayudar al prójimo”.
Por su parte, la Directora del Colegio Espíritu Santo de Talcahuano, Verónica Leiva, señaló que asisten cada año a esta misa y “para los jóvenes es muy significativo estar en la misa presente acompañados de nuestro Obispo. En el fondo ellos se sienten con la bendición para comenzar el año escolar”.
La delegación del Colegio Inmaculada Concepción de Talcahuano también fue parte de la actividad y el Subdirector de la Pastoral, Pablo Choloux, mencionó que “partir el año con una bendición de nuestro pastor es super importante y el sentirnos también como iglesia, como cuerpo, como comunidad todos los colegios es edificante”.