Una amplia participación tuvo la Misa de Bendición de Lápices, que se realizó la tarde del 5 de diciembre y que fue presidida por el Arzobispo de Concepción, Monseñor Fernando Chomali Garib.
Esta tradicional Bendición de Lápices es una forma de bendecir a los estudiantes que darán la Prueba de Transición Universitaria, pero también a aquellos que terminaron su etapa escolar y elegirán otros caminos.
En su homilía Monseñor Chomali llamó a los jóvenes a partir “con gran entusiasmo, con gran fe y con gran esperanza por todo el trabajo que han realizado”.
Además, afirmó que hoy demostraron “que tienen fe, que creen firmemente que ‘si el Señor no construye la casa, en vano se cansan los albañiles’”. En ese contexto, agregó que “la gran crisis que estamos viviendo en el mundo es una crisis que tiene que ver con la espiritualidad, con el anhelo del hombre y de la mujer de querer construirse al margen de Dios. Y nosotros sabemos que Dios es el fundamento de nuestra vida, es aquel que nos crea, que nos cuida y nos da una vocación. Y ustedes van a postular a una carrera, porque han hecho un discernimiento para sacar adelante una vocación, un llamado, que es mucho más que un trabajo, es el sentido de la vida que Dios les ha dado a cada uno de ustedes”.
La misa se realizó no sólo de manera presencial, sino que también de forma telemática, para que también pudiesen sumarse jóvenes de otros puntos del país.
En ese sentido, tras la celebración, el Arzobispo de Concepción destacó que se trató de un regalo de Dios y que “mucha gente de todo Chile se sumó a esta bendición”, lo que demuestra que “los jóvenes son religiosos, los jóvenes son creyentes, hay muchos jóvenes católicos” y también que “quieren aportar al país, esforzándose, trabajando. Todos tienen bastante claro las carreras que quieren estudiar y por lo tanto esto nos da esperanza”.
“La esperanza que nos dan estos jóvenes es para nosotros un impulso para seguir trabajando”, enfatizó.
Por su parte, el Padre Víctor Álvarez, párroco de la P. Universitaria, dijo que se trata de “una instancia muy importante, de poder conectar la fe con la vida” y agregó que “es un buen espacio para vivir este momento en comunidad, con otros, y tomar conciencia de que Dios nos acompaña en todos los procesos de la vida”.
Isidora Maza, quien egresó del Colegio Concepción de Pedro de Valdivia, señaló que cuando se enteró decidió participar de forma presencial e indicó que se trata de un momento especial, ya que considera que esta bendición le brinda tranquilidad y “un poco más de seguridad y confianza”.
Mientras que Paula Poblete Pincheira, egresada del Colegio Andrés Bello de Chiguayante, acudió con su hermano y contó que decidieron ir tras ver la publicación en Instagram. Paula afirmó que este año fue difícil por tener que alejarse de sus compañeros y valoró esta instancia para “que los alumnos tengan más positividad” al momento de dar la prueba.