Con una gran convocatoria se llevó a cabo el Congreso para Padres y Apoderados “El ejercicio de una parentalidad positiva en la sociedad actual”, organizado por la Vicaría para la Educación y la Cultura (Viceduc) la mañana de este sábado 1 de julio.
Esta instancia forma parte del trabajo de acompañamiento que realiza la Viceduc con los diferentes estamentos y busca entregar, a padres y apoderados, herramientas que apoyen el proceso formativo de sus hijos.
La jornada comenzó con la ponencia del Arzobispo de Concepción, Monseñor Fernando Chomali, quien habló sobre tres aspectos a trabajar: “la profundidad espiritual, la fraternidad y la solidaridad. Porque somos conscientes de las palabras de Jesús y de que, sin Él, no podemos hacer nada”.
Así también, se refirió a la importancia que tienen los siete compromisos del Pacto Educativo Global. En especial, el compromiso que habla sobre el rol indispensable de la familia como primer educador, porque son los responsables de educar y construir personas con valores, responsables, dispuestas a la escucha, al diálogo y la reflexión.
La segunda parte del congreso tuvo como relatora a Verónica Villarroel, PhD. en Psicología y Máster en Psicología Educacional, quien expusó sobre la “Parentalidad positiva: Implicancias en el desarrollo de niños, niñas y adolescentes”, motivando a los asistentes a reflexionar y profundizar un poco más sobre este estilo de crianza que se centra en fortalecer la relación entre padres e hijos, para potenciar el bienestar emocional y promover un ambiente familiar saludable.
“Llegar a formar una parentalidad positiva requiere mucho compromiso, atención, autoobservación, autocrítica. Requiere también de metas como pareja, como padres, como familia, porque como dice el Papa Francisco: para preservar la armonía en la familia, hay que luchar contra la dictadura del yo”, puntualizó la psicóloga.
Por último, padres y apoderados participaron en un trabajo grupal en el que pudieron analizar el tema y compartir experiencias en relación a su rol como padre/madre, sus prácticas parentales y la posibilidad de aplicar e instaurar este tipo de crianza en sus núcleos familiares.
Para Paulina Jara, apoderada del Colegio Margarita Naseau de Tomé, fue “una experiencia maravillosa. Las palabras de monseñor fueron precisas y en estos congresos uno se da cuenta de que comparte muchas vivencias y que no es la única que tiene conflictos familiares”.
Carlos Sandoval, apoderado del Colegio Madres Dominicas de Concepción, describió la jornada como enriquecedora, “Las palabras del Arzobispo, nos hicieron reflexionar mucho sobre la realidad actual y cómo ven nuestros niños esa realidad que vivimos actualmente, que es muy diferente a la que nosotros tuvimos, y la otra parte de la actividad nos permitió reflexionar y evaluarnos como padres, sobre cómo lo estamos haciendo y qué aspectos debemos reforzar”.
Por su parte, Carola Farias, apoderada del Instituto de Humanidades de Coronel, señaló estar ”muy contenta de haber participado en esta instancia, porque nos ha servido mucho para enriquecer las distintas experiencias de cada uno de nosotros y el proceso de crianza”.
